Nuzlocke XY 20: La humillación de Lysson

20. La humillación de Lysson

En la segunda guarida del Team Flare preparaban todo lo necesario para activar y utilizar el Arma Definitiva. Los dólmenes cercanos a Pueblo Crómlech estaban siendo usados como focos emisores de energía, con Pokémon atados a ellos. Unos dispositivos serían capaces de absorber toda la energía de los Pokémon y utilizarla como fuente de alimentación del Arma, y de ese modo causar un cataclismo a nivel mundial que redujera el nivel de la población de Pokémon y personas hasta hacerla controlable.

Lysson. Maldito tarado partidario del Nuevo Poké-Orden Mundial. No sueltes lágrimas de Krookodile. Tu estúpido equipo ya se ha llevado bastante. Me desafió una vez más. Y procuré humillarle todo lo que pude.

Usé a Sultán, mi Pokémon con el nivel más bajo. El sólo fue capaz de despachar a cada uno de los Pokémon de su equipo con Tóxico, Excavar, Descanso, Rizo Algodón y el objeto Casco Dentado. Experimenté cierto placer vengativo viendo como sus infelices Pokémon se estampaban contra el muro perruno, que resistía impertérrito sus estúpidas acometidas. El veneno acababa con ellos lenta pero inexorablemente, convirtiéndose en la manifestación de una derrota anunciada.

Sufre, capullo.

Después de derrotar a los últimos restos pusilánimes del Team Flare llegué a la parte más profunda del cráter, donde descansaba Xerneas en forma de árbol. Tras combatir contra él y debilitarlo lo suficiente conseguí capturarlo con una Malla Ball. No me preguntéis como. No obstante, se qeudará en la caja: no voy a usar legendarios en este desafío. 

Justo entonces bajó Lysson, rollo Tao Pai Pai remodelado, con un visor en los ojos tipo Cíclope de X-Men, tentáculos y moscas mecánicas a la espalda. Aseguró conocer el secreto de la Mega Evolución. Veamos que tal se da la revancha.

Esta vez fue más complicado. El Mienshao cayó con relativa facilidad ante Link, pero su estúpido Pyroar no dejaba de dar golpes críticos con su puñetera Llamarada. Tanto es así que Zoidberg estuvo a punto de acabar convertido en langosta cocida. Hounchkrow siguió en la línea de los críticos, pero Sultán lo aguantó bien hasta que cayó envenenado y exhausto.

El Mega Gyarados fue más duro. Su habilidad Rompemoldes ignoraba por completo el Pelaje Recio de Sultán, que empezó a recibir golpes considerables. No obstante, gracias a Rizo Algodón aguantó los coletazos bastante bien, mientras el bicharraco se empalaba con el Casco Dentado una y otra vez hasta caer derrotado.